Por Licdo. Maximiano Millan
La Unidad Educativa Nueva América del Barrio 24 de julio, sector La Polar del Municipio San Francisco, Maracaibo, Estado Zulia, es el centro de Fe y Alegría donde se desarrolla el siguiente proyecto productivo. No se puede decir que esta comunidad del Barrio 24 de julio, está totalmente consolidada. En el ámbito de servicios públicos podríamos afirmar que el agua es mucho más inconstante en su llegada que en el resto de la ciudad (a veces no llega en tres días), lo normal es cada dos, cuando el resto de la ciudad la recibe día de por medio. El transporte público depende de prácticamente una sola línea que relativamente tiene una buena cantidad de carritos y microbuses, pero que dada la densidad poblacional del sector se siente poco eficiente en su servicio.
Además de esto, en general nuestros alumnos tienen un bajo nivel de peso y talla, de acuerdo con el diagnóstico realizado hace tres años por el profesor de deportes, lo cual delata un problema de alimentación, que es obviamente consecuencia de la situación social de las familias que habitan en este sector.
La experiencia que se presenta, pretende mostrar cómo la sencilla aplicación del conocimiento tecnológico en el campo del Dibujo Técnico, puede resolver un problema de espacio no utilizado y convertir un árido patio en el centro de una escuela en un sitio de práctica del deporte y de diversión para los estudiantes, además de desarrollar en los participantes valores como el trabajo en equipo y el trabajo como valor en si mismo. Punto aparte merece la manera mediante la cual el estudiante se apropia del conocimiento, puesto que genera entre otras cosas, confianza en si mismo y desarrollo de la lectura. Y es a través de esta ultima, la forma mediante la cual va el estudiante descubriendo por si mismo, un mundo de aplicaciones técnicas que lo ocupan totalmente en sus horas de clase.
Desde el año escolar pasado, el actual grupo de octavo grado, conoció el instrumento básico para desarrollar el presente proyecto: el compás de los egipcios, que no es mas que una cuerda atada a dos estacas de madera. A pesar de no hacer ninguna práctica con este instrumento, fue interesante ver que un elemento tan sencillo, ayudó a levantar, por ejemplo, las famosas pirámides.
Ya este año, luego de discutir y decidir qué íbamos a desarrollar como proyecto productivo, comenzamos a relacionarnos con la figura del óvalo, como forma de acercamiento a la pista de atletismo, puesto que el proyecto era trazar en el patio central de la escuela, una pista de atletismo para usarla durante los juegos internos del centro educativo.
Finalmente fue necesario aprender cómo podemos meter una pista de cuatrocientos metros en una hoja de papel de veintiocho centímetros de largo, el dominio del escalímetro les dio la capacidad de hacer el boceto y el plano guía para ejecutar el trazado en el patio del centro.
En alianza con el área de matemáticas, pudimos calcular cuantas veces había que reducir la pista de atletismo para que cupiera en el espacio disponible y también cuanto sería el recorrido completo de dicha pista.
Se pretende con la presente sistematización: en primer lugar demostrar que las aplicaciones tecnológicas no son siempre complejas. En segundo lugar, aplicar técnicas sencillas de trazado para replantear en terrenos con poco uso, obras civiles de gran envergadura. Y finalmente mostrar lo pedagógicamente productiva que puede ser una sencilla técnica de trazado.
Los dos primeros objetivos, se obtuvieron de manera directa al desarrollar en el patio del Centro Educativo el replanteo de la pista. El tercer objetivo necesita de una evaluación de la experiencia de parte de los estudiantes con algunos criterios clarificadores sobre lo aprendido.
Al finalizar la lectura del presente trabajo se espera haber contribuido a desmitificar la palabra tecnología y a mostrar la manera tan simple pero emocionante mediante la cual nuestros estudiantes se apropian del conocimiento.
A pesar de ser desarrollado en su totalidad este proceso de sistematización por el profesor de la materia, no es menos cierto que sin las palabras, evaluaciones y comentarios de los estudiantes del curso de octavo grado de Educación Básica del Centro Educativo mencionado hubiese sido imposible o al menos no pertinente el desarrollo de este trabajo.
Igualmente se debe notar que sin una Coordinación Pedagógica que corrija las planificaciones y sugiera elementos de desarrollo y presentación, no se podría desarrollar de forma completa esta sistematización.
Finalmente, un buen equipo de trabajo es también importante. El resto de los profesores de la Tercera Etapa y específicamente del área de Educación para el Trabajo, con sus críticas y evaluaciones también se han hecho parte de esta presentación.
La temática central de este trabajo es la construcción de obras civiles de utilidad pública. Cada vez que una obra de gran tamaño va a ser puesta en el terreno, los ejecutores requieren de aparatos y técnicas de trazado que les permita colocar en el mismo, las fundaciones de la obra o en otros casos delinear los espacios a ser utilizados o no.
Estas técnicas de trazado son en muchos casos desconocidas por el común de las personas, pero los materiales que se pueden ver en las construcciones denotan su sencillez: cuerda, trozos de cabillas, pedazos de tabla y cal.
Al comenzar esta actividad se preguntó el profesor de la materia ¿serán capaces los alumnos de octavo grado de trazar una pista de carreras o una cancha de algún deporte en el patio del Centro Educativo?
Teóricamente se tiene claro que la sencillez de la tecnología a usar, ayuda en mucho a que sea posible llegar a realizar ese trazado propuesto, pero aún así, el tener que coordinar un trabajo en un gran espacio, el manejar el trazo en la hoja de papel y hacer la transición hacia un área que es mas de treinta mil veces mas grande que el dibujo a escala que trazó en el taller, hace que tengamos que contextualizar esta experiencia.
Estamos ante una sencilla práctica de replanteo de terrenos, es decir que simplemente trazaremos unas líneas en el patio central del Centro Educativo, que pudiesen servir de base para una construcción civil que no necesariamente se deba ejecutar. Por lo tanto cuando se hable de ejecutar el proyecto, simplemente significará que estamos replanteando en el terreno la obra y no que arrancó la construcción de la pista o la cancha.
Para dejar constancia de la obtención de los objetivos de esta sistematización, deben recogerse los siguientes datos confirmatorios: en primer lugar las evidencias del trabajo que dentro del aula, se ha venido desarrollando desde el inicio del año escolar. Además de esto es muy importante obtener un registro de los diferentes momentos, en los cuales los cuatro grupos de octavo grado trazaron la pista en el patio del Centro Educativo y finalmente habría que cerrar la obtención de datos de esta experiencia con una evaluación grupal e individual por parte de los estudiantes y un registro testimonial de lo que significó esta experiencia para ellos, los estudiantes.
Para la primera parte, se recomienda la construcción de un portafolio del docente, que contenga una muestra de los trabajos que los estudiantes van desarrollando para prepararse para la ejecución del proyecto.
En el momento de la ejecución del proyecto se contó con una cámara digital con la que se tomó registro de los momentos de trabajo de cada uno de los grupos de octavo grado.
Para la última parte de recolección de datos, se consideró conveniente realizar un cuestionario evaluador de la experiencia y tabular las respuestas de los estudiantes. Se complementó dicha información escrita con un testimonial en video y en grabación de voz que permite analizar que tan significativa fue la experiencia para los estudiantes.
Al recoger los primeros relatos e impresiones del trabajo realizado, lo que se siente en común en los muchachos de octavo grado es la sensación de éxito, “lo hicimos profe”. Un testimonio que se desea dejar por escrito es que cinco días después del trazado de la pista, las marcas de cal se habían borrado, varios de ellos se me acercaron y con tristeza comentaron: “No hombre profe, tanto trabajo y ya se borró” es la clásica tristeza del que ve desaparecer un trabajo querido y exitoso.
Dentro del proceso histórico de esta experiencia indudablemente que el día de la ejecución fue el de mayor peso. Sin embargo fueron varios meses de trabajo conjunto. Se comenzó a familiarizar a los estudiantes con la figura del óvalo y al mismo tiempo se pidió investigar las dimensiones de una pista de carreras. En la investigación se descubrió que la pista de atletismo no era ovalada sino el conjunto de dos arcos de circunferencia empalmados a dos líneas paralelas, esto facilitaría el trazado en el patio.
Luego el conocimiento del dibujo a escala y el uso del escalímetro, dos aspectos importantísimos para entender y comprender el trabajo que se emprendía. Al medir el patio en sus dos dimensiones y compararlo con las dimensiones de la pista, hubo que hacer cálculos para decidir cuantas veces se debía reducir la pista para que entrara en el patio. La parte preparatoria terminó con la elaboración de un boceto en papel carta y un plano en lámina de papel bond.
Y llegó el día del trazado. Se ejecutaron dos trazos de prueba con cabilla y remarcando con agua y dos trazos definitivos remarcando con cal, un par de ejecuciones por cada curso de octavo grado.
La manera de transferir el conocimiento del trazado en papel a trazar en el patio, fue organizando equipos de trabajo, cada uno de los cuales tenía las mismas funciones que los instrumentos del Dibujo Técnico. Así teníamos los equipos llamados: Compás, Lápiz, Regla, Plano, Escalímetro y Borrador. El día de la ejecución añadimos el equipo de Apoyo y Seguridad, puesto que las clases se estaban desenvolviendo normalmente y había otros estudiantes que se atravesaban y también porque la deshidratación hizo estragos en ellos.
En las fotos y videos puede apreciarse que los estudiantes entendieron cuando actuar como equipo, puesto que ya en el taller habían conocido el uso de cada instrumento.
El trabajo en el patio era: trazar una línea de base y desde esta una paralela a unos diecisiete metros de separación. Luego se trazaban en los extremos de las paralelas, a unos diecinueve metros de separación, dos perpendiculares que conformarían un rectángulo. Se le busca con el compás el punto medio a las perpendiculares trazadas y desde ese centro se empalman las paralelas con dos arcos de circunferencia a cada lado. Con la figura externa de la pista ya trazada se procede a trazar tres arcos concéntricos con el primero a un metro veinte de separación cada uno, para que aparezcan los carriles, en cada uno de los extremos de la pista. Se finaliza el trabajo uniendo con la lienza y en línea recta los tres arcos nuevos para completar los carriles en la parte recta de la pista.
Las pruebas de trazado con cada grupo duraron aproximadamente noventa minutos para trazar solo la mitad de la pista, y el trazado de la misma en cal y completa duró ciento cuarenta minutos aproximadamente, bajo un inclemente sol de medio día. Sin embargo, al finalizar el trabajo y tener trazados delante de ellos tres carriles para correr, parecía no importar para nada el cansancio. Hicieron tres filas y “en sus marcas listos, fuera”. ¿Para que la hicimos sino es para correr? Los videos muestran: alegría, bromas, estudiantes nada aventajados para el deporte intentándolo, pero divirtiéndose. Otros que se ven con buenas aptitudes, aprovechado el trazado quizás para soñar con una pista olímpica y competir. Y para terminar con la historia de la experiencia, cuando ya los estudiantes ejecutores se habían marchado, en el Centro Educativo, estaba en clase un grupo de noveno grado, que al salir y ver el trazado terminado, se lanzó también a la diversión. La sola presencia de un espacio deportivo de cualquier especialidad produce en los estudiantes el ánimo de jugar ese deporte, así ha sido siempre.
En esta experiencia significativa hemos podido desmitificar el término “tecnología”, siempre asociado a lo digital, lo informático, lo difícil y sólo para los estudiosos. Recuerdo muchos artículos de prensa sobre la teoría de supuestos extraterrestres enseñando a los egipcios el trazado de las pirámides. Cuando veo lo que unos muchachos pudieron hacer con dos cabillas y un trozo de lienza, entiendo donde estaba el conocimiento que permitió esas fabulosas construcciones: dentro de la cabeza de los egipcios.
En segundo término, se ha querido presentar de forma sencilla, otro aporte exitoso que ayudará a validar la metodología de los proyectos productivos. Cuando los estudiantes le ven sentido al contenido, dentro del aula nadie siente que está perdiendo el tiempo y se preocupa por aprender el contenido, en función del proyecto, de esa obra que vamos a realizar.
Finalmente, teoría y praxis, son caras de la misma moneda, no podemos para nada, pensar que esto hubiese sido posible con el solo entrenamiento de algunos aventajados estudiantes. En los videos se observa grupos de alumnos pendientes de todo el procedimiento y créanlo, todos se sentían con el derecho a preguntar o a dar su opinión, por que todos tenían conocimiento sobre lo que se estaba haciendo, algunos mas que otros pero todos sabían qué era lo que estaban trazando.
Trazado o replanteo de una pista de carreras, era el nombre técnico que cualquier docente de Dibujo hubiese pensado para esta experiencia significativa, pero cuando se le pidió a un grupo de estudiantes que pensara en un nombre para el proyecto, una de ellas dijo: “De la cabeza a los pies, profe”, al preguntarle la razón, rápidamente respondió: “por que estuvimos pariendo en la cabeza la pista esa y al final la terminamos usando con los pies”. De la teoría a la praxis, ninguna de las dos puede existir sin la otra, así se llama esta experiencia: “De la cabeza a los pies”
Además de esto, en general nuestros alumnos tienen un bajo nivel de peso y talla, de acuerdo con el diagnóstico realizado hace tres años por el profesor de deportes, lo cual delata un problema de alimentación, que es obviamente consecuencia de la situación social de las familias que habitan en este sector.
La experiencia que se presenta, pretende mostrar cómo la sencilla aplicación del conocimiento tecnológico en el campo del Dibujo Técnico, puede resolver un problema de espacio no utilizado y convertir un árido patio en el centro de una escuela en un sitio de práctica del deporte y de diversión para los estudiantes, además de desarrollar en los participantes valores como el trabajo en equipo y el trabajo como valor en si mismo. Punto aparte merece la manera mediante la cual el estudiante se apropia del conocimiento, puesto que genera entre otras cosas, confianza en si mismo y desarrollo de la lectura. Y es a través de esta ultima, la forma mediante la cual va el estudiante descubriendo por si mismo, un mundo de aplicaciones técnicas que lo ocupan totalmente en sus horas de clase.
Desde el año escolar pasado, el actual grupo de octavo grado, conoció el instrumento básico para desarrollar el presente proyecto: el compás de los egipcios, que no es mas que una cuerda atada a dos estacas de madera. A pesar de no hacer ninguna práctica con este instrumento, fue interesante ver que un elemento tan sencillo, ayudó a levantar, por ejemplo, las famosas pirámides.
Ya este año, luego de discutir y decidir qué íbamos a desarrollar como proyecto productivo, comenzamos a relacionarnos con la figura del óvalo, como forma de acercamiento a la pista de atletismo, puesto que el proyecto era trazar en el patio central de la escuela, una pista de atletismo para usarla durante los juegos internos del centro educativo.
Finalmente fue necesario aprender cómo podemos meter una pista de cuatrocientos metros en una hoja de papel de veintiocho centímetros de largo, el dominio del escalímetro les dio la capacidad de hacer el boceto y el plano guía para ejecutar el trazado en el patio del centro.
En alianza con el área de matemáticas, pudimos calcular cuantas veces había que reducir la pista de atletismo para que cupiera en el espacio disponible y también cuanto sería el recorrido completo de dicha pista.
Se pretende con la presente sistematización: en primer lugar demostrar que las aplicaciones tecnológicas no son siempre complejas. En segundo lugar, aplicar técnicas sencillas de trazado para replantear en terrenos con poco uso, obras civiles de gran envergadura. Y finalmente mostrar lo pedagógicamente productiva que puede ser una sencilla técnica de trazado.
Los dos primeros objetivos, se obtuvieron de manera directa al desarrollar en el patio del Centro Educativo el replanteo de la pista. El tercer objetivo necesita de una evaluación de la experiencia de parte de los estudiantes con algunos criterios clarificadores sobre lo aprendido.
Al finalizar la lectura del presente trabajo se espera haber contribuido a desmitificar la palabra tecnología y a mostrar la manera tan simple pero emocionante mediante la cual nuestros estudiantes se apropian del conocimiento.
A pesar de ser desarrollado en su totalidad este proceso de sistematización por el profesor de la materia, no es menos cierto que sin las palabras, evaluaciones y comentarios de los estudiantes del curso de octavo grado de Educación Básica del Centro Educativo mencionado hubiese sido imposible o al menos no pertinente el desarrollo de este trabajo.
Igualmente se debe notar que sin una Coordinación Pedagógica que corrija las planificaciones y sugiera elementos de desarrollo y presentación, no se podría desarrollar de forma completa esta sistematización.
Finalmente, un buen equipo de trabajo es también importante. El resto de los profesores de la Tercera Etapa y específicamente del área de Educación para el Trabajo, con sus críticas y evaluaciones también se han hecho parte de esta presentación.
La temática central de este trabajo es la construcción de obras civiles de utilidad pública. Cada vez que una obra de gran tamaño va a ser puesta en el terreno, los ejecutores requieren de aparatos y técnicas de trazado que les permita colocar en el mismo, las fundaciones de la obra o en otros casos delinear los espacios a ser utilizados o no.
Estas técnicas de trazado son en muchos casos desconocidas por el común de las personas, pero los materiales que se pueden ver en las construcciones denotan su sencillez: cuerda, trozos de cabillas, pedazos de tabla y cal.
Al comenzar esta actividad se preguntó el profesor de la materia ¿serán capaces los alumnos de octavo grado de trazar una pista de carreras o una cancha de algún deporte en el patio del Centro Educativo?
Teóricamente se tiene claro que la sencillez de la tecnología a usar, ayuda en mucho a que sea posible llegar a realizar ese trazado propuesto, pero aún así, el tener que coordinar un trabajo en un gran espacio, el manejar el trazo en la hoja de papel y hacer la transición hacia un área que es mas de treinta mil veces mas grande que el dibujo a escala que trazó en el taller, hace que tengamos que contextualizar esta experiencia.
Estamos ante una sencilla práctica de replanteo de terrenos, es decir que simplemente trazaremos unas líneas en el patio central del Centro Educativo, que pudiesen servir de base para una construcción civil que no necesariamente se deba ejecutar. Por lo tanto cuando se hable de ejecutar el proyecto, simplemente significará que estamos replanteando en el terreno la obra y no que arrancó la construcción de la pista o la cancha.
Para dejar constancia de la obtención de los objetivos de esta sistematización, deben recogerse los siguientes datos confirmatorios: en primer lugar las evidencias del trabajo que dentro del aula, se ha venido desarrollando desde el inicio del año escolar. Además de esto es muy importante obtener un registro de los diferentes momentos, en los cuales los cuatro grupos de octavo grado trazaron la pista en el patio del Centro Educativo y finalmente habría que cerrar la obtención de datos de esta experiencia con una evaluación grupal e individual por parte de los estudiantes y un registro testimonial de lo que significó esta experiencia para ellos, los estudiantes.
Para la primera parte, se recomienda la construcción de un portafolio del docente, que contenga una muestra de los trabajos que los estudiantes van desarrollando para prepararse para la ejecución del proyecto.
En el momento de la ejecución del proyecto se contó con una cámara digital con la que se tomó registro de los momentos de trabajo de cada uno de los grupos de octavo grado.
Para la última parte de recolección de datos, se consideró conveniente realizar un cuestionario evaluador de la experiencia y tabular las respuestas de los estudiantes. Se complementó dicha información escrita con un testimonial en video y en grabación de voz que permite analizar que tan significativa fue la experiencia para los estudiantes.
Al recoger los primeros relatos e impresiones del trabajo realizado, lo que se siente en común en los muchachos de octavo grado es la sensación de éxito, “lo hicimos profe”. Un testimonio que se desea dejar por escrito es que cinco días después del trazado de la pista, las marcas de cal se habían borrado, varios de ellos se me acercaron y con tristeza comentaron: “No hombre profe, tanto trabajo y ya se borró” es la clásica tristeza del que ve desaparecer un trabajo querido y exitoso.
Dentro del proceso histórico de esta experiencia indudablemente que el día de la ejecución fue el de mayor peso. Sin embargo fueron varios meses de trabajo conjunto. Se comenzó a familiarizar a los estudiantes con la figura del óvalo y al mismo tiempo se pidió investigar las dimensiones de una pista de carreras. En la investigación se descubrió que la pista de atletismo no era ovalada sino el conjunto de dos arcos de circunferencia empalmados a dos líneas paralelas, esto facilitaría el trazado en el patio.
Luego el conocimiento del dibujo a escala y el uso del escalímetro, dos aspectos importantísimos para entender y comprender el trabajo que se emprendía. Al medir el patio en sus dos dimensiones y compararlo con las dimensiones de la pista, hubo que hacer cálculos para decidir cuantas veces se debía reducir la pista para que entrara en el patio. La parte preparatoria terminó con la elaboración de un boceto en papel carta y un plano en lámina de papel bond.
Y llegó el día del trazado. Se ejecutaron dos trazos de prueba con cabilla y remarcando con agua y dos trazos definitivos remarcando con cal, un par de ejecuciones por cada curso de octavo grado.
La manera de transferir el conocimiento del trazado en papel a trazar en el patio, fue organizando equipos de trabajo, cada uno de los cuales tenía las mismas funciones que los instrumentos del Dibujo Técnico. Así teníamos los equipos llamados: Compás, Lápiz, Regla, Plano, Escalímetro y Borrador. El día de la ejecución añadimos el equipo de Apoyo y Seguridad, puesto que las clases se estaban desenvolviendo normalmente y había otros estudiantes que se atravesaban y también porque la deshidratación hizo estragos en ellos.
En las fotos y videos puede apreciarse que los estudiantes entendieron cuando actuar como equipo, puesto que ya en el taller habían conocido el uso de cada instrumento.
El trabajo en el patio era: trazar una línea de base y desde esta una paralela a unos diecisiete metros de separación. Luego se trazaban en los extremos de las paralelas, a unos diecinueve metros de separación, dos perpendiculares que conformarían un rectángulo. Se le busca con el compás el punto medio a las perpendiculares trazadas y desde ese centro se empalman las paralelas con dos arcos de circunferencia a cada lado. Con la figura externa de la pista ya trazada se procede a trazar tres arcos concéntricos con el primero a un metro veinte de separación cada uno, para que aparezcan los carriles, en cada uno de los extremos de la pista. Se finaliza el trabajo uniendo con la lienza y en línea recta los tres arcos nuevos para completar los carriles en la parte recta de la pista.
Las pruebas de trazado con cada grupo duraron aproximadamente noventa minutos para trazar solo la mitad de la pista, y el trazado de la misma en cal y completa duró ciento cuarenta minutos aproximadamente, bajo un inclemente sol de medio día. Sin embargo, al finalizar el trabajo y tener trazados delante de ellos tres carriles para correr, parecía no importar para nada el cansancio. Hicieron tres filas y “en sus marcas listos, fuera”. ¿Para que la hicimos sino es para correr? Los videos muestran: alegría, bromas, estudiantes nada aventajados para el deporte intentándolo, pero divirtiéndose. Otros que se ven con buenas aptitudes, aprovechado el trazado quizás para soñar con una pista olímpica y competir. Y para terminar con la historia de la experiencia, cuando ya los estudiantes ejecutores se habían marchado, en el Centro Educativo, estaba en clase un grupo de noveno grado, que al salir y ver el trazado terminado, se lanzó también a la diversión. La sola presencia de un espacio deportivo de cualquier especialidad produce en los estudiantes el ánimo de jugar ese deporte, así ha sido siempre.
En esta experiencia significativa hemos podido desmitificar el término “tecnología”, siempre asociado a lo digital, lo informático, lo difícil y sólo para los estudiosos. Recuerdo muchos artículos de prensa sobre la teoría de supuestos extraterrestres enseñando a los egipcios el trazado de las pirámides. Cuando veo lo que unos muchachos pudieron hacer con dos cabillas y un trozo de lienza, entiendo donde estaba el conocimiento que permitió esas fabulosas construcciones: dentro de la cabeza de los egipcios.
En segundo término, se ha querido presentar de forma sencilla, otro aporte exitoso que ayudará a validar la metodología de los proyectos productivos. Cuando los estudiantes le ven sentido al contenido, dentro del aula nadie siente que está perdiendo el tiempo y se preocupa por aprender el contenido, en función del proyecto, de esa obra que vamos a realizar.
Finalmente, teoría y praxis, son caras de la misma moneda, no podemos para nada, pensar que esto hubiese sido posible con el solo entrenamiento de algunos aventajados estudiantes. En los videos se observa grupos de alumnos pendientes de todo el procedimiento y créanlo, todos se sentían con el derecho a preguntar o a dar su opinión, por que todos tenían conocimiento sobre lo que se estaba haciendo, algunos mas que otros pero todos sabían qué era lo que estaban trazando.
Trazado o replanteo de una pista de carreras, era el nombre técnico que cualquier docente de Dibujo hubiese pensado para esta experiencia significativa, pero cuando se le pidió a un grupo de estudiantes que pensara en un nombre para el proyecto, una de ellas dijo: “De la cabeza a los pies, profe”, al preguntarle la razón, rápidamente respondió: “por que estuvimos pariendo en la cabeza la pista esa y al final la terminamos usando con los pies”. De la teoría a la praxis, ninguna de las dos puede existir sin la otra, así se llama esta experiencia: “De la cabeza a los pies”
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